Por el desalojo de Can Vies y demás abusos policiales en la Barcelona del mayo del 2014.
Mamá,
nos han desalojado.
Se me parte el
pecho,
el techo.
Arde la hoguera de
la rabia
y me balanceo en la
grieta de la cuna.
La solidaridad me
escuece al cicatrizar.
El barrio no se
vende,
se defiende.
Está el suelo mojado
de tanto llanto.
La tormenta nos ha
empapado.
Decían que no era
correcto,
Que ese techo no era
nuestro.
Mamá,
Nos han pegado,
arrancado.
No sé si decido
dormirme
o me olvido de
respirar sin darme cuenta.
Me balanceo en la
grieta de la cuna…
El barrio no se
vende,
se defiende.
El barrio no se
vende,
se defiende.
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